Cuando se trata de elegir materiales para una cocina en tonos fríos, la decisión entre cuarzo y granito puede ser complicada. Ambos materiales ofrecen una gran durabilidad, lo que los hace ideales para la cocina. Yo diría que el cuarzo es conocido por su composición uniforme y una paleta de colores que incluye más opciones en tonos fríos. De hecho, la variedad de colores que el cuarzo puede ofrecer es casi infinita, gracias a su fabricación industrial. Esto lo hace perfecto si buscas un tono específico para tu cocina, como los grises o los azules suaves que están muy de moda.
El granito, por otro lado, es una piedra natural que presenta patrones y colores más variables. Cada placa es única, lo que es fantástico si buscas algo que nadie más tenga, pero puede ser limitante si quieres algo más controlado y específico. Además, a pesar de su belleza natural, encontrar un granito que encaje a la perfección con los tonos fríos puede ser difícil, ya que generalmente tiene tonos cálidos o más terrosos.
Desde un punto de vista funcional, el cuarzo ofrece una mayor resistencia a las manchas y es menos poroso que el granito. Esto significa que, en el uso diario, el cuarzo puede ser más fácil de mantener, ya que no necesita sellarse periódicamente como el granito. Hablando de costos, el precio del cuarzo y el granito puede variar considerablemente dependiendo del mercado local y la disponibilidad, pero en general, ambos pueden oscilar entre los 50 y 200 euros por metro cuadrado. Por lo tanto, el precio no suele ser un factor decisivo, aunque el cuarzo a menudo es un poco más caro debido a su proceso de fabricación.
Ahora, si nos remontamos a la tendencia en diseño de interiores, muchos diseñadores de renombre optan por cristales de cuarzo debido a su apariencia moderna y uniforme. Un ejemplo es el conocido diseño de interiores que hizo una famosa cadena hotelera de lujo en sus cocinas de suite, eligiendo cuarzo en lugar de granito para mantener una estética limpia y contemporánea. Esto nos lleva a pensar en preguntas como: ¿Cuál es más fácil de mantener? Aquí, el cuarzo sale ganando al requerir menos mantenimiento y no temerle a las manchas ni a los ácidos de algunos alimentos.
Además, el cuarzo a menudo viene con garantías mucho más extensas, que en algunos casos alcanzan hasta los 25 años, lo cual es una tranquilidad muy valorada. Si bien el granito puede durar toda una vida si se mantiene adecuadamente, no siempre viene con garantías tan largas debido a su naturaleza más variable y porosa. En mi experiencia personal, he encontrado que aquellos que eligen el cuarzo valoran la durabilidad sin complicaciones y la estética uniforme, especialmente si buscan algo que complemente los tonos fríos sin esforzarse demasiado.
Por último, si decides invertir en cuarzo, puedes leer más sobre su durabilidad siguiendo este link, donde encontrarás más detalles sobre por qué este material merece la pena. Es la elección que tal vez se adapta mejor a un hogar moderno que busca elegancia y funcionalidad.